En un momento trascendental para la política estadounidense, Sarah McBride ha hecho historia nuevamente. A sus 34 años, se ha convertido en la primera persona transgénero en ocupar un lugar en el Congreso de Estados Unidos, representando al estado de Delaware. Este logro es un hito más en su trayectoria, luego de haber sido la primera senadora transgénero hace cuatro años.
McBride venció al republicano John Whalen III en las elecciones para la Cámara de Representantes, en una victoria que refuerza el compromiso del Partido Demócrata con los derechos de la comunidad LGTBIQ+. Organizaciones como Human Rights Campaign (HRC) han celebrado su éxito, destacando su impacto positivo. “¡Estamos tan orgullosos, congresista electa Sarah McBride! Su historia inspirará a los jóvenes LGTBIQ+ a soñar en grande y cambiar el mundo”, expresó HRC en redes sociales.
TRAILBLAZER! Delaware State Sen. Sarah McBride is headed to Washington and will be the FIRST OPENLY TRANS member of Congress.
— HRC (@HRC) November 6, 2024
We’re so proud, Congresswoman-elect @SarahEMcBride! Your story will help LGBTQ+ youth dream bigger, reach higher & change the world:… pic.twitter.com/QTrCbxy7zo
En una reciente entrevista con CBS, McBride destacó que su papel como pionera viene acompañado de grandes responsabilidades. Entre sus prioridades legislativas se encuentran el acceso a vivienda, la defensa del derecho al aborto, la mejora del sistema de salud pública y la reducción de los costos de cuidado infantil. Su carrera ha estado marcada por un constante activismo en favor de la igualdad y las reformas sociales, abarcando temas como la equidad laboral y el acceso a servicios básicos.
En un panorama político complejo, con posibles avances conservadores en las cámaras, la victoria de McBride simboliza una luz de esperanza para quienes luchan por un país más inclusivo. Incluso el presidente Joe Biden, quien previamente contó con su asesoría en temas de igualdad y derechos LGTBIQ+, ha mostrado su apoyo hacia su labor.
La historia de Sarah McBride no solo refleja su valentía personal, sino que también abre nuevas puertas para la representación diversa en el ámbito político.
